La medicina física y rehabilitación se le conoce como fisiatría. La fisiatría veterinaria cuenta con varios métodos que ayudan a tratar una enfermedad o una lesión.
Existen varias Técnicas de fisiatría, entre las que se encuentran las siguientes:
Magnetoterapia: Estimula procesos de regeneración de tejidos, control del dolor e inflamación, acelera cicatrización de heridas y relaja la musculatura.
Laserterapia: Sirve como analgésico, antiinflamatorio y para acelerar cicatrización de heridas cutáneas de las mascotas.
Fototerapia: Utiliza emisión de luz y sus efectos son el de producir reducción del dolor y disminuir el tiempo de cicatrización. Estimula la formación de callo óseo y sirve como relajante.
Infrasonido: Función principal es la de disolver contracturas musculares y fibrosis.
Ultrasonido: Antiespasmódico, relajante, tiene también efecto de micro masaje, aceleración de heridas cutáneas y aumenta la elasticidad de cicatrices, articulaciones, tendones, ligamentos y cápsula articular.
Calor: Ayuda a reducir el dolor, ya que disminuye los espasmos musculares, aumenta el flujo sanguíneo local y estimula las terminaciones nerviosas en la piel.
Frío: Para lesiones agudas para disminución del dolor y control de la inflamación. Sirve como estímulo sobre terminaciones nerviosas en la piel.
Este tipo de tratamientos pueden funcionar de manera preventiva en algunos casos, como controlar la obesidad en las mascotas para evitar posibles lesiones por causa del sobrepeso.
Fortalecen la musculatura del animal, los tendones y los ligamentos, para mantener el rango de movilidad de articulaciones afectadas por enfermedad degenerativa articular (artrosis).
Un tratamiento quiropráctico se puede realizar de forma profiláctica con el fin de ajustar todas las articulaciones del cuerpo. Esto ayuda a mejorar la calidad de vida de la mascota.
Otra terapias preventiva es la aplicación de ozono, para estimular el sistema inmunológico y se mejora la salud en general de nuestra mascota.
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