El comercial de la aseguradora Folksam en noviembre del 2012, fue muy criticado al creer que los gatos saltaban de un avión.
La publicidad fue realizada con la técnica de croma o pantalla verde, por lo que ninguno de los animales tuvo que salir del estudio.
La idea fue de una clienta de esta empresa Eva Leijonmark quien previamente había asegurado a su mascota.
En el comercial, los gatos paracaidistas forman su nombre en una formación aérea.
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